martes, 21 de octubre de 2008

Jornada de descanso y visita a Taxco


Primer día de los supuestos de descanso, que utilizamos en hacer turismo, Taxco es el destino. Taxco es una bella población enclavada en una montalla, un lugar famoso por las minas de plata, un lugar muy turístico.
Llegamos al centro en el coche de Checho y de inmediato somos asediados por lugareños que pretenden que aparquemos en su aparcamiento, que bebamos, que bebamos o que compremos en los locales que les dan propina, mientras, infinidad de vendedores ambulantes nos asedian. Si cometes el error de comprarle a uno, ya tienes que comprarle a todos. Mis amigos mexicanos se rén porque les digo que "primero vinimos los españoles ofreciendo baratijas a los indios a cambio de oro y plata y ahora las tornas se han cambiado y son ellos los que nos ofrecen baratijas a cambio de nuestro dinero".

Después de comer en un restaurante en el que nos estafan (eso si, con preciosas vistas), dimos la última vuelta y retornamos a Cuernavaca. El viaje de vuelta se hizo pesadísimo, por lo que decidimos "indultar" a nuestros buenos amigos (Checho, Alejandro y Nuria) y nos volvemos al DF en autobús (aquí le llaman "camión"). A la llegada a la ciudad "agarramos" (aquí no se debe decir "cogimos") un taxi de los "seguros", pero pese a que lo era, pasamos una cierta paranoia, ya que durante el camino el conductor pitó a unos conocidos suyos y nos asustamos pensando que podría ser la "señal a sus cómplices para secuestranos", jajajaja, son las cosas de haber escuchado tantas historias al respecto. Los taxis seguros, son seguros.
Hoy tenemos un día muy tranquilo, seguramente saldremos a comer por ahí con nuestro amigo Nahuel. Mañana hay concierto y debemos descansar.

1 comentario:

Carlos de Abuin dijo...

mientras no te coja un toro, todo va bien...

abrazos!!!

ps: en una hora hago 43, como el licor, si es queeeee....