miércoles, 7 de diciembre de 2011

Aremy y Edel, ¡qué grandes tipos!

Acepté con mucho gusto la invitación que me hicieron Aremy Rergis y el poeta Edel Juárez para comer comida yucateca. Quedamos Aremy y yo en el metro, nos reunimos con Edel en el restaurante, donde pude saborear la exquisita comida que me aconsejaron, regada con magníficas cervezas de la tierra.


A los postres, me llevaron al mítico café "La ópera", uno de los locales más bonitos de México, donde nos tomamos unos rones exquisitos. Edel tuvo el detalle de regalarme un disco, un disco infantil que dice que me encantará, se trata de "Los 100 clásicos de Cri-Cri". Ya os contaré qué me parece. Bueno, no sólo me regaló ese, me hizo entrega de una gran cantidad de material suyo.

Después, nos dirigimos a una "mezcalería" (donde se toma mezcal, una bebida típica mexicana, con graduaciones sobre los 50º, una barbaridad) que ellos conocían, donde estuvimos de plática hasta bien entrada la noche. Yo sólo pude tomarme un mezcal, de inmediato me pasé a la cerveza.

Para cerrar con broche de otro la noche, nos fuimos a "Los parados" a comer unos tacos (al fín pude pagar algo, una de las dos rondas que tomamos la pagué "a traición", ya que llevaban todo el día sin dejarme pagar). Al final pedimos unos taxis y nos fuimos a dormir, por mi parte en bastante mejor estado del que me temí que acabaría teniendo. Edel, te prometo que entregaré el matearial que me has dado a Quique. Tú sabes a qué Quique me refiero. ¡Qué día más bueno he pasado!

No hay comentarios: